Llama la atención sobre el valor informativo que acompaña a las distintas técnicas de ordenación de la materia y señala la inconsistencia que suele observarse entre las prácticas de ordinatio conservadas en los testimonios medievales y los textos críticos resultantes de las prácticas editoriales modernas. Ejemplifica especialmente con las tradiciones épica e historiográfica y, contra la hegemonía del textus receptus, aconseja volver los ojos al procedimiento de collatio externa, no sólo como herramienta de la recensio sino como paso importante para evaluar la intervención editorial dentro de la dispositio textus, bien para mantener, bien para modificar la información obtenida en el proceso descriptivo (pero, en este último caso, con oportuno aviso al lector de la naturaleza de la ordinatio conservada en los testimonios).