El presente libro, que reúne varios trabajos publicados por el autor entre los años 1974 y 2000, propone un cercamiento al universo simbólico medieval a partir de la interpretación del mundo animal que ofrecen los bestiarios. Tras una primera parte, en la que se exponen los principios que fundamentan dicho procedimiento hermenéutico y sus implicaciones teológicas, en la segunda se analizan diversos aspectos parciales u obras particulares, que sirven de aplicación a los principios generales de la primera parte: la víbora como simbolo del mal, el Liber monstruorum atribuido a Aldelmo de Malmesbury, el De avibus de Hugo de Fouilloy, los animales en los sermones de San Antonio, el Bestiaire d’Amours de Richard de Fournival, el bestiario ígneo de Giacomo da Lentini, L’Acerba de Cecco d’Ascoli o el mito del ave Fénix.