Su hipótesis de trabajo es la involucración de los clérigos autores de esta escuela en los profundos cambios que experimenta la sociedad de la época; desde esta perspectiva analiza la obra de Berceo (de la que dedica un capítulo especial a Santa Oria y la intervención femenina en su producción), Alexandre, Fernán González, Apolonio y Elena y María. Concluye que la ambigüedad y las contradicciones internas del movimiento, aparte de las que ya estaben presentes en sus fuents, derivan en gran medida de su función de mediadores culturales.