A partir del prólogo que Rodrigo Jiménez de Rada redactó para su Historia de rebus Hispaniae, y, en particular, de la captatio benevolentiae sobre el que se construye, el artículo indaga en los tópicos usados para descubrir el grado de innovación y la intencionalidad que esconden. De este modo, resulta claro el proceso de renovación que llevó a cabo el historiógrafo, muy vinculado al contexto político en el que se insertaba su obra. El prólogo se convierte en «el espacio textual en el que el Toledano nos expone no sólo su proyecto historiográfico sino también parte de las orientaciones ideológicas (elogio de la monarquía, apología del saber) y estéticas (esmero en la forma) en que estriba su obra» (p. 718) y que la convertirán en un punto de inflexión en la historia de las crónicas medievales.