Esta obra colectiva bajo la dirección de Daniel Russo tiene por objeto «leer» las pinturas que, a lo largo de las épocas, han recubierto la superficie de los muros de los edificios. Puede así escribirse una historia de las tensiones perceptibles entre el interior y el exterior, lo material y la idea, el fondo y la superficie. Tras una introducción, la obra se organiza en cuatro secciones: 1) arqueología de las pinturas murales, 2) pinturas murales y lugares de culto, 3) pinturas murales en Borgoña y 4) pinturas murales fuera de Borgoña.